¿Y tú que eres? ¿Introvertido o extrovertido? Si no sabes como responder esta sencilla pregunta, existe una prueba muy curiosa con la que puedes comprobarlo. Se trata del “test del limón”, la cual últimamente está siendo bastante comentada en Internet y ha atraído la curiosidad de mucha gente.
Para realizarla únicamente vas a necesitar tres cosas:
- Un hisopo de algodón / bastoncillo de algodón
- Un poco de jugo de limón concentrado
- Un hilo
El test se realiza de la siguiente manera: pon un extremo del hisopo sobre tu lengua durante veinte segundos. Luego sácalo y enseguida vierte cinco gotas de jugo de limón en tu lengua y trágalas. Después coloca el otro extremo del hisopo y retenlo en tu boca otros veinte segundos. Al finalizar, tienes que atar el hilo en el centro del mismo y dejarlo colgando.
La idea es ver si el hisopo se queda colgando en posición horizontal o si le gana el peso del extremo que probaste con el jugo, y cuelga verticalmente. El resultado puede revelar dos aspectos:
- Si el lado que probaste después de tragar las gotas de limón hace que cuelgue verticalmente, eres alguien introvertido.
- Si por el contrario, el hisopo cuelga de manera vertical, quiere decir que no reaccionaste demasiado con el cítrico y eres más extrovertido.
¿Qué tiene que ver el limón con tu forma de ser?
Según algunos científicos, los hemisferios del cerebro están directamente ligados con las reacciones a la acidez del limón. Quienes son tímidos tienden a salivar más porque experimentan una excitación cortical basal mayor, la cual supuestamente es una base fisiológica de la personalidad.
De hecho, este experimento era muy usado en la década de los 60 por los pioneros de la personalidad, Hans y Sybil Eysenck.
A pesar de estas pequeñas explicaciones científicas, hay que admitir que este test sigue siendo perfectamente cuestionable.