Cuando se trata de cítricos como las mandarinas, lo más normal es que nos deshagamos de la cáscara sin sospechar que, al igual que la pulpa que guardan en su interior, esta también contiene grandes propiedades para la salud. Tales como las que mencionamos a continuación:
- Es rica en valiosas vitaminas del grupo B (B1, B2, B3, B6 y B9).
- Contiene minerales buenos para el organismo, como el fósforo, el zinc, el hierro, el potasio y el calcio.
- Y por si fuera poco, cuenta con un aroma excelente.
A decir verdad, hay varias maneras de aprovechar al máximo las cáscaras de mandarina para aliviar todo tipo de padecimientos. ¡Y de manera mucho más efectiva que con las medicinas!
Aquí tienes las 7 enfermedades más comunes que puedes sanar con cáscaras y cómo hacerlo:
- Tos.
Si sientes malestar en la garganta, lo único que debes hacer es tomar una cáscara de mandarina y cortarla en trozos pequeños, para dejarlos secar. Una vez que estén bien deshidratados, caliente agua en un vaso y agrégalos. Déjalos reposando por una semana y luego cuela el líquido.
Ahora todos los días, toma unas veinte gotas de esta preparación y disuélvela en un vaso de agua templada, que tomarás con cada comida. ¡Seguro te sentirás mucho mejor!
- Bronquitis.
Se trata de una de las peores afecciones respiratorias. Para tratarla, pon a calentar un vaso de agua y añade media cáscara de mandarina. Luego bébelo como si fuera un té. Puedes ingerirlo hasta tres veces diarias; poco a poco notarás una mejoría en tus bronquios.
- Congestión nasal.
Para la nariz tapada, puedes cortar varias cáscaras y colocarlas en un recipiente con agua hirviendo. Acércate con cuidado e inhala los vapores que se desprendan del agua por unos seis minutos.
No hay nada más eficaz para aliviar la congestión, en pocos minutos podrás respirar con libertad.
- Insomnio y cansancio.
En caso de que experimentes agotamiento físico o tengas problemas para dormir, todo lo que tienes que hacer es llenar una bolsa pequeña con trozos de cáscara de mandarina, para que puedas olerlas. Su aroma tiene un efecto relajante con el que podrás conciliar mejor el sueño.
Este remedio también es muy bueno si tienes dolores de cabeza.
- Problemas de digestión.
Si sueles tener gases, hinchazón en el estómago u otros inconvenientes digestivos, tritura una o dos cáscaras hasta convertirlas en un polvo muy fino. Espolvoréalo sobre cada una de tus comidas y en poco tiempo notarás la diferencia.
La fibra de la mandarina es buena para agilizar tu digestión y además, tampoco altera el sabor de los alimentos, así que puedes usarla sin miedo.
- Taquicardia e hipertensión.
Pon a hervir tres litros de agua y agrega unas cáscaras de mandarina. Después, cuela el líquido y procede a darte un baño con él. Aunque sencillo, este remedio es buenísimo para las afecciones cardíacas como estas; en especial cuando hay estrés de por medio.
No olvides bañarte con esta preparación un día sí y un día no.
- Hongos de los pies.
Las plantas de los pies pueden convertirse fácilmente en foco de infecciones, especialmente cuando usas calzado cerrado sin calcetas o no los secas correctamente después de la ducha. Por suerte, la cáscara de mandarina es una solución increíble y fácil de aplicar.
Simplemente tienes que frotar la parte interna contra tus pies suavemente, como si te estuvieras dando un masaje. De esta manera puedes prevenir la proliferación de hongos y el mal olor.
Como ves la mandarina es un fruto milagroso. Ahora que sabes cómo aprovecharla al completo, te recomendamos incluirla en tu dieta.