No hay nada mejor que comenzar el día con una deliciosa taza de café, bebida sin la cual no podríamos emprender la jornada con el pie derecho. ¿Alguna vez te has preguntado qué es lo que pasa en tu organismo cuando lo consumes todos los días? Si sigues leyendo la respuesta te sorprenderá.
Te brinda energía. Beber café por las mañanas es bueno no solo para despertar, sino también para incrementar tu concentración y recordar las cosas con mayor facilidad.
Acelera tu metabolismo. Sus activos hacen que tu cuerpo queme calorías más rápido. Esto a la larga, combinado con ejercicio y una buena alimentación, es ideal para evitar la diabetes.
Disminuye la posibilidad de cáncer. Ingerir dos tazas de café por día reduce ampliamente las posibilidades de cáncer en órganos como el hígado, la próstata y las mamas.
Es bueno contra la depresión. De acuerdo con un estudio de la Universidad de Harvard, beber hasta 4 tazas de café al día es efectivo en las mujeres depresivas, atenuando esta terrible enfermedad hasta en un 20%.
Reduce el riesgo de padecer Alzheimer. Otra característica del café es que estimula la actividad cerebral, lo cual es básico en contra de enfermedades degenerativas como esta. También previene el Parkinson.
Es mejor que el alcohol. Dos tazas de café diarias contrarrestan los efectos de la cirrosis, ocasionada precisamente por el abuso de alcohol; siempre y cuando la persona se abstenga de consumir bebidas alcohólicas.
Previene las enfermedades del corazón. Padecimientos como la hipertensión, los derrames cerebrales, las insuficiencias cardíacas y el colesterol alto, se pueden prevenir bebiendo de 3 a 5 tazas cada día.
Estas definitivamente son grandes razones para amar el café. Y también para empezar a consumirlo más a menudo, si eres de los que todavía no le han encontrado el gusto.