En los días calurosos, no hay nada más rico que darse un buen chapuzón ¿y qué sitio es mejor que el mismo mar para hacerlo?
Sin embargo, no todos en el mundo son tan afortunados como para poder nadar en una piscina / alberca como la que vas a ver a continuación. Kastrup Sea Bath, es el nombre de un sitio muy peculiar ubicado en Kastrup Strandpark, al oeste de la playa de Amager, en Copenhague, Dinamarca.
Destaca por ser una inmensa instalación de madera en forma de concha, cuya figura asimétrica alcanza cinco metros de altura en su parte más alta. Hasta ella, se llega por una plataforma alargada que se adentra en el mar.
Gracias a sus paredes circulares, esta piscina es un refugio de ensueño para los bañistas que quieren un poco de sol y ocio.
Reforzadas con madera africana azóbe, son capaces de resistir fuertes vientos, lluvias y el embate de las mismas aguas saladas, pues se dice que este material es tan resistente como el acero. De noche, Kastrup Sea Bath cuenta también con sofisticada iluminación.
Un par de vestuarios para hombres y mujeres terminan de conformar la estructura, así como sus múltiples escalinatas y miradores para obtener una vista privilegiada del océano.
Creado en el 2005 por el arquitecto Fredrik Pettersson, de la compañía White Arkitekter, desde sus inicios como un lugar que se pudiera ver tanto desde tierra como aire, y en la que estos dos elementos se conjuntaran de manera majestuosa con el mar.
Hoy, se ha convertido en el punto preferido de cientos de vacacionistas y daneses que solo quiere relajarse un rato.
¿Lo mejor de este Kastrup Sea Bath? ¡Está abierto para toda la gente, todos los días del año!
No cabe duda de que este es el sueño de muchos nadadores.