Todos conocemos el mito judeocristiano que habla de Moisés abriendo el Mar Rojo, para que su gente pudiera cruzar caminando. Una escena que solo parece posible en las películas o la imaginación. Sin embargo, te quedarías anonadado si supieras que existe un lugar en el mundo en donde literalmente, se puede hacer esto.
En Corea, hay un archipiélago conformado por 250 islas conocido como Condado de Jindo, debido al tercer islote de mayor tamaño con el mismo nombre. Aquí, cada año, miles de coreanos y turistas se reúnen para ir a pie desde Jindo hasta el pequeño cayo de Modo, caminando entre las aguas por un sendero que tiene más de 2 kilómetros de longitud y entre 10 y 40 metros de anchura.
El evento es conocido como el “Camino del Mar de Jindo” y goza de gran popularidad alrededor del mundo desde 1975, año en el que embajador francés Pierre Randi, habló sobre el mismo para la prensa.
Este suceso también forma parte de la mitología local, gracias a una hermosa leyenda que explica su origen.
La historia cuenta como hace siglos, los tigres se habían apoderado de la isla de Jindo, por lo que la gente huyó hacia el islote de Modo. Todos se fueron excepto Ppong, una vieja mujer que se quedó rezagada.
En el afán de reunirse de nuevo con su familia, Ppong le rezó al rey dragón para que acudiera en su auxilio. Una noche, él se le presentó en un sueño y le reveló que haría aparecer un arcoíris a manera de puente, para que pudiera cruzar. Por la mañana, la anciana vio surgir el misterioso arco y fue capaz de andar por el mar.
A la fecha, el festival de Jindo recibe anualmente cerca de un millón de asistentes, entre coreanos y extranjeros.