Una gran sorpresa se han llevado los habitantes de la Costa Este de Buxton, en Carolina del Norte, EE.UU., al ver emerger una isla que se convirtió en la sensación del verano.
Con sus 1,500 metros de extensión y un ancho de 146 metros, esta nueva atracción tan cercana a Cape Point ciertamente ha dado mucho de que hablar.
Tan solo han bastado unos cuantos días para que adquiriera tan descomunales dimensiones, ocupando la atención tanto de los lugareños como de periodistas.
Shelly Island, fue llamada de esta manera luego de que una mujer local llevará a su pequeño hijo a recoger conchas marinas, (concha es “Shell” en inglés), las cuales son muy abundantes en esta zona. Desde entonces, los medios la han dado a conocer por medio de este particular mote.
Por tentadora que suene la idea de ir a visitarla, sin embargo, las autoridades han desalentado a la gente de que lo haga. Y es que al parecer, se ha vuelto una locación muy peligrosa.
Esto se debe no solo a las numerosas rayas y tiburones que viven en estas aguas. También a la cantidad de anzuelos que puede haber ocultos entre ellas, debido a que el área es sumamente popular para pescar. Se suma a dichos factores la arrolladora corriente que se ha formado en el estrecho pasadizo de quince metros, que se ha formado entre la isla y el continente. Nada apto para quienes cruzar, ya sea a nado o en bote.
Bill Smith, dirigente de la Asociación North Carolina Beach, ha sido el encargado de emitir las advertencias pertinentes e informar a los medios de comunicación sobre las circunstancias de esta nueva delta.
Aunque sea imposible visitarla, (al menos por el momento), no cabe duda que estará atrayendo a muchos turistas en los próximos días.