México está a unos cuantos días de tener su peor participación en juegos olímpicos desde el 1950, lo que ha hecho que miles de personas comiencen a quejarse sobre el nivel deportivo del país, haciendo que la CONADE se vea mal, especialmente gracias a que Alfredo Castillo, director de la institución, se está dando una “luna de miel olímpica” con su novia en Río 2016.
Así es, el verdadero desastre que esta sucediendo en Río 2016 no es culpa de los atletas, sino que nos debemos de enfocar en quienes privilegian la política y viajes costosos con cargo al erario en lugar de preocuparse por la preparación deportiva.
Como estamos acostumbrados en México, estas malas admiraciones siempre vienen desde el punto más alto de las instituciones, tal y como pasó en junio de este año en el que vimos el gran desdén del gobierno de Enrique Peña Nieto hacia el talento deportivo del país.
¿De qué estamos hablando? El pasado 15 de junio de 2016, decenas de jóvenes deportistas tuvieron que dormir en el suelo durante la Olimpiada Juvenil debido a que la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE) abandonó por completo a sus deportistas y no pagó sus hospedajes. Por esa sencilla razón alrededor de 100 niños que viajaron desde Tamaulipas hasta Mazatlán, Sinaloa tuvieron que dormir en el suelo. Supuestamente la CONADE tenía todo listo desde el 2015.
Cuando los deportistas llegaron al hotel, se les informó que la federación no había pagado hospedajes y alimentos, por lo que algunos niños tuvieron que dormir en el lobby del hotel y otros incluso en el suelo. Además de esto tampoco tuvieron el transporte indicado, ya que hay varias fotografías en las que se les puede ver siendo transportados en camionetas privadas.
Todos estos problemas comienzan desde el director de la CONADE, Alfredo Castillo, quien para empezar no sabe absolutamente nada de deportes, solo practico tenis como pasatiempo. Este hombre es uno de los consentidos de Peña Nieto, quien le ha dado distintos puestos importantes.