Esta antigua casa llama la atención debido a que fue de las pocas que logro soportar al poderoso huracán Katrina que arrasó con la ciudad de Nueva Orleans hace algunos años.
Con más de 200 años de antigüedad, esta casa soporto, pero su aspecto exterior quedo muy dañado, dándole un aspecto de abandonada y casi en ruinas. Nunca te animarías a comprar esta casa al verla desde afuera, pero créeme que una vez que veas su interior cambiaras de parecer.
Situada en al barrio francés de la ciudad, lo primero que vemos en la parte baja de la casa es un gran salón-comedor que se conecta con la cocina en un concepto abierto, dándole a la planta inferior mucho espacio.
Las escaleras de caracol o espiral le dan un buen aspecto y ahorran espacio al conectar con la planta alta de la casa. La sala, con dos sillones de piel y una mesa de centro luce muy cómoda.
En cuanto a la planta superior de la casa. Vemos que el dormitorio queda ubicado justo debajo del techo, sin paredes que lo separen del resto del segundo piso. En realidad queda bastante bien y ahorra mucho espacio.
Todo el piso de abajo se ve desde la planta superior, pero posiblemente lo mejor es el gran candelabro que le da un toque sumamente elegante a la casa. La casa cuenta con un pequeño patio que agrega un poco de verde a la paleta de colores de la casa y tiene una mesa que luce estupenda para un buen desayuno a la luz del sol o para una agradable tardeada con los amigos.
Aunque muchas personas no se mostraban interesados, en el año 2005, el artista Lenny Kravitz compro la casa y la adorno a su gusto, dando un aspecto un tanto más moderno y lleno de “música”, aunque la casa permanece con toda la historia que ha guardado durante 200 años.