Ser profesor no es un trabajo muy sencillo, debes de tener la forma correcta de enseñar y convivir con tus alumnos, ya que es un hecho que cuando un alumno no disfruta de una clase no es por la materia, sino que es por la forma en que el profesor da la clase.
En esta ocasión hablaremos de una maestra que es muy querida por sus alumnos, Shari Castlebury, una profesora de primer grado en Lawton, Oklahoma, en Estados Unidos, quien disfruta de su trabajo y lo hace apasionadamente.
El ciclo escolar llegaba a su final, fechas en las que los profesores y alumnos hacen cosas distintas para recordar ese año de sus vidas. Pero esta maestra, afirma que era un año especial, “me enamore de todos ellos y quise hacer algo especial para no olvidarlos nunca y que ellos me recordaran”, comentó al periódico local.
Shari vio que otros de los profesores de la escuela hacían algunas cosas originales para recordar a sus alumnos, así que se inspiró en ellos y se le ocurrió decorar uno de sus vestidos blancos con dibujos y firmas de sus alumnos.
Cuando la maestra les explicó a los alumnos que tenían la oportunidad de hacer un dibujo en su vestido se mostraron muy emocionados por la idea. Así que uno a uno fueron plasmando sus creaciones en el vestido blanco de su maestra.
El resultado final fue mucho mejor de lo que nos hubiéramos esperado, en realidad el vestido quedo bastante bien. Lo llevo puesto el último día de clases y la reacción de sus alumnos hizo que tomara la decisión de hacer de esto una tradicional anual, usando los vestidos en ocasiones especiales.