Fran Mariano es un joven popular en su país luego de haber participado en ShowMatch, Soñando por bailar y más adelante en Cuestión de Peso. Este último programa ayuda a personas con obesidad a perder peso y mejorar su salud y figura.
Luego de bajar 92 Kg era otro, sin embargo, no se detuvo ahí y comenzó a realizarse una serie de operaciones estéticas que lo han dejado irreconocible.
“Inicié en el año 2010, voy por la novena cirugía, sin contar el botox y el metacrilato. La belleza te da un poder que es muy difícil de rechazar. Estás con un aspecto personal no muy agradable y la gente te trata diferente. La cirugía es un camino de ida. No podés parar”, dijo a TN famosos.
Se ha operado cuatro veces la nariz , también se sometió a una liposucción en el trasero, “y con esa misma grasa me practicaron una lipotransferencia en los pómulos”, confesó.
Según sus propias palabras, su adicción al metacrilato hizo que perdiera la sensibilidad en la cara, aún así, no se arrepiente de nada: “Entre tener una cara divina y tener una cara fea pero sentirla, me quedo con la cara divina”.
“Me despegué el surco nasogeniano de la cara y me lo rellenaron con metacrilato, al igual que en la frente. Además, me hice un retoque en el mentón por tercera vez por una mala cicatrización [de una cirugía anterior]”, agregó. “Ya me dicen que me parezco mucho a Ricky Martin”, comentó.
“Pienso vivir el resto de mi vida así. Voy a hacerme cirugías toda la vida. Voy a iniciar con los liftings más adelante. No acepto algo que no me gusta en mi cuerpo. No acepto envejecer“
¿Del 1 al 10 que parecido tiene con Ricky Martín?
Cada día son más las personas que deciden pasar por el quirófano para corregir pequeños o grandes aspectos que ellos consideran “imperfectos“. Y si bien es verdad que muchas de estas cirugías con actos razonados, también es cierto que muchas personas son verdaderos adictos que no pueden detenerse y ante cualquier signo de envejecimiento acuden al acto quirúrgico.
Adicción a la cirugía plástica: un mínimo defecto y al quirófano
A decir de la psicóloga Julia Vidal, especialista en trastornos del comportamiento alimentario e imagen corporal, en estos casos a través de varias sesiones de terapia se puede lograr que la persona reflexione sobre qué es lo que se pretende obtener con ese cambio. “Muchas veces, cuando se dan cuenta que eso lo pueden conseguir sin modificar su imagen, les sorprende mucho” afirma.
¿Qué opinas si se parece?
Recuerda que, aunque nuestra imagen es la primera presentación ante los demás, lo más importante es lo que llevamos dentro, nuestros valores y personalidad.