Anele Masilela, un niño de 8 años de edad, se casó con Helen Shabangu, una anciana de 61 años de edad.
Durante una ceremonia que se llevó a cabo el fin de semana pasado en el distrito de Tshwanena, Provincia Gauteng, Sudáfrica.
A la fiesta asistieron alrededor de 100 invitados, entre amigos y familiares, en dónde también iba como invitado el marido de Helen (la esposa) y sus cinco hijos, todos mayores que el pequeño Anele.
El motivo por el que se llevó a cabo esta boda, según la tía de Anele, Patience Masilela, de 46 años de edad, fue porque el abuelo del niño le pidió que se casara en una ceremonia de este tipo, y eligió a Helen porque él la amaba.
La familia, por temor a experimentar la ira de los muertos, quiso hacer realidad la voluntad del abuelo, llevando esta ceremonia con mucha seriedad. Pagaron a la novia desde marzo del año pasado y se gastaron todos sus ahorros para poder llevar a cabo la ceremonia, todo con el fin de que el abuelo pudiera descansar en paz.
Helen, la novia, comentó:
“Estoy casada y tengo cinco hijos, pero sé que este es el deseo de los padres, y ahora todo el mundo debe de ser feliz. Esto es sólo un ritual, una especie de broma, pero es una señal de que él se va a casar algún día y será muy feliz cuando lo haga”.
Por tu parte, el marido de Helen comentó que ni a él ni a sus hijos les molestaba esta ceremonia, pero que algunos vecinos quedaron completamente sorprendidos al ver lo que sucedía.
Asimismo, el pequeño Anele comentó:
“Le dije a mi mamá que me quería casar, porque yo lo quiero. Elegí a la señora Helen porque la amo y soy feliz de haberme casado con ella, pero voy a seguir con mis estudios, ya que estudio mucho. Cuando sea mayor, me casare con una mujer de mi edad”.
No se firmó ningún certificado de matrimonio y no están viviendo juntos.