El perro es considerado el mejor amigo del hombre gracias a la lealtad a sus dueños sin esperar nada a cambio. Pero, en una localidad de China, más que un amigo, es considerado toda una deidad que es adorada cada año.
Se trata del Festival del Día del Acarreo del Perro, celebrado por la gente de Miao, en la villa Jiaobang, ubicada en la provincia de Guizhou. Este animal ha sido adorado durante siglos por los pobladores del lugar.
Cuanta la leyenda que un día, los primeros pobladores de la zona estaban a punto de morir de sed. En ese momento, un perro apareció y los llevó hasta una fuente de agua que se encontraba en el lugar, un acto que tomaron como una señal divina.
La celebración se realiza con un perro elegido, al que se le viste con camisa a medida y sombrero, luego es colocado sobre una silla y se realiza un desfile. Mientras es llevado es a un arrozal, la gente canta, toca tambores mientras le agradecen al animal y piden por buenas cosechas para el año que comienza.
El desfile es dirigido por un chamán, mientras los pobladores se cubren y lanzan barro en señal de adoración. Hay quienes han criticado esta festividad, pues aseguran que se tortura al perro al colocarle cadenas en el cuello.
Esta costumbre de adoración contrasta en mucho con la que se realiza en la localidad china de Yulin, donde los comerciantes promocionan, desde el 2010, el consumo de carne de perro, los cuales son “cazados” y asesinados cruelmente para vender su carne.