El emblemático edificio de Ciudad Juárez llamado Gardié que estuvo cerrado durante 21 años ha abierto sus puertas una vez más, en esta ocasión como un restaurante-bar llamado Sfaira, que ocupa dos de los cinco pisos que tiene el edificio.
“La Bola” aún no se ha terminado, ya que solamente los dos pisos más altos se encuentran funcionales, mientras que los tres pisos de abajo tienen planes de convertirse en un gran casino, para lo que ya se están haciendo algunas obras de acondicionamiento.
La reapertura de este emblemático edificio se logró gracias a una inversión combinada entre algunos socios locales y una empresa regiomontana, quienes siempre habían tenido el sueño de hacer que este edificio cobrará vida de nuevo para que los adultos pudieran ir a recordar y los jóvenes a conocer el edificio que formaba parte de algunas de las historias de sus padres.
En parte la inversión se hizo porque los socios sienten que “Juárez ha vuelto a la tranquilidad de antes”, indica Jorge Cueto Talavera, el representante del negocio. Por otra parte, se sabía que un casino estaba buscando un buen lugar para ubicarse dentro de la ciudad de Juárez, y cuando Perry Wolf Escobedo se enteró que había un lugar dentro del Gardié se aferró a la idea hasta convertirse en el nuevo socio.
“Conocimos al dueño del edificio y a su familia. Ellos no tenían el mínimo interés de hacer algo con el edificio, de hecho, llevaban tiempo esperando una oferta para venderlo o que hicieran algo con él.”.
La gran remodelación del Gardié tardo 18 meses, dándole un mejor aspecto por fuera y dejándolo muy moderno y lujoso por dentro, en dónde los comensales pueden disfrutar de una rica comida mexicana moderna y unos tragos por un promedio de 160 pesos.