Una de las más recientes atracciones abiertas en la CDMX y que rápidamente se ha llenado de visitantes, es la réplica de la Capilla Sixtina de la basílica de San Pedro, en la ciudad del Vaticano. Conocida por resguardar muchas las de las obras de arte más importantes del mundo; en su mayoría frescos pintados por Miguel Ángel Buonarroti, era de esperarse que su montaje en la capital mexicana causara tanto revuelo.
Si estás pensando en asistir próximamente, te comentamos lo bueno y lo malo que puedes esperar de la exposición para que vayas bien preparado.
Lo bueno de la Capilla Sixtina
Te alegrará saber que el acceso a este montaje es completamente gratuito, por lo cual es una buena opción para acudir en familia aunque eso sí, antes debes hacer un registro online en esta web.
El proyecto consiste en un acercamiento buenísimo a la Capilla Sixtina original, ya que podrás hacer un recorrido en 360° grados en una estructura que ocupa más de 3,000 metros cuadrados, y que ha sido decorada con telas impresas que son una copia exacta de los frescos de Buonarroti.
Lo mejor es que todo está elaborado al 100% por mexicanos y que ahí mismo te explican con detalle cada fragmento de las pinturas.
Lo malo de la Capilla Sixtina
Debido a la concurrencia es necesario llegar treinta minutos antes para hacer fila, ya que cada quince minutos ingresan hasta 300 personas. Debes llevar calzado ligero y están prohibidos los zapatos de tacón, pues el piso es de cristal templado. Tampoco se permite tomar fotos ni vídeos, debido al contrato de exclusividad con el Vaticano.
La Capilla Sixtina en México permanecerá hasta el día 24 de junio, y se encuentra en la Plaza de la República, abierta de las 11:00 a las 20:00 horas.