Ya pasaron algunos días desde que se dio a conocer lo que hablaron el presidente de México, Enrique Peña Nieto, y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, durante su llamada telefónica del pasado 27 de enero, en donde México se negó a pagar por el muro y a visitar a Trump para hablar sobre el tema.
Al inicio, los medios nos dieron a entender que los mandatarios habían tenido una conversación “amistosa”, en la cual, hablaron de acuerdos con el objetivo de construir un mejor futuro para ambos países, pero en realidad eso no fue lo que pasó durante la llamada telefónica.
Según la información que ha sido revelada, Trump le habría dicho en tono amenazante a Peña Nieto que Estados Unidos no necesitaba para nada a México o los mexicanos, y que, si sus fuerzas armadas fueron incapaces de acabar con el narcotráfico, “tal vez” sería mejor que enviara tropas estadounidenses para hacer bien las cosas.
Varias fuentes han asegurado que en realidad fue una llamada bastante ofensiva, en la que Trump intentó humillar a Peña Nieto en todo momento, e incluso lo llamó con un denigrante sobrenombre “Little Enrique”, lo que se podría decir como “Enriquito”, lo que nos hace recordar cuando Trump llamaba “Little Marco” a su contrincante Marco Rubio.
Para finalizar, el mandatario de Estados Unidos comentó en un tono bastante amenazante: “No necesito de los mexicanos y tampoco necesitamos a México, vamos a hacer el muro y ustedes van a pagar por él, les guste o no les guste”.
La relación entre los dos países es la peor en casi 100 años, por lo que se cree que varios tratados se podrían romper, razón por la que los gobiernos ya están volteando a ver otros países para hacer tratados comerciales y mejorar relaciones.