La capital mexicana está llena de rincones fascinantes por conocer. El sistema de transporte público te permitirá acudir a las mejores zonas de la CDMX. Vehículos como el metro y el metrobús constituyen la manera más eficiente de visitar barrios y lugares diversos organizando tu tiempo y tu presupuesto.
Optar por esta alternativa en lugar de un coche particular, conlleva múltiples ventajas:
Tabla de contenidos
Es amigable con el Medio Ambiente
Siendo una de las ciudades más pobladas del mundo, es un hecho que la CDMX necesita reducir su huella ambiental. Por ello se ha exhortado a la población a emplear los servicios públicos para viajar, mediante el mejoramiento de los mismos y la implementación del programa No Circula para vehículos privados.
Esto previene los congestionamientos y reduce la contaminación, incrementando la calidad de vida de las personas.
Seguridad e inclusión para todos
La seguridad de grupos vulnerables es parte esencial del funcionamiento del Metro de Ciudad de México, así como del metrobús. En ambos encontrarás asientos especiales para mujeres embarazadas y personas con capacidades diferentes.
Mujeres y niños menores de 12 años también se han beneficiado con vagones exclusivos, resolución que previene el acoso en espacios tan concurridos como estos.
Así mismo, hay quienes gozan siempre de pase gratuito: niños menores de 5 años, gente con capacidades distintas y adultos mayores.
Evade el tráfico y ahórrate el estacionamiento
Manejar un coche propio en la capital puede ser complicado. El tráfico no descansa nunca, y a menos que pagues un estacionamiento particular, encontrar un sitio para aparcar será una tarea imposible.
Ambos inconvenientes dejan de existir cuando te animas a viajar en transporte público. Así también reduces tus tiempos de traslado y dejas de pagar por estacionarte o poner gasolina.
Es bueno para tu salud y tu tiempo
Es verdad que se camina un poco más cuando te mueves en el transporte público, pero esto es bueno para tu cuerpo y tu ánimo. Después de todo, no hay mejor manera de apreciar la CDMX que mientras andas por sus calles.
Por otra parte, si tu tiempo de traslado es largo, puedes invertirlo en pequeñas actividades que te relajen como leer o escuchar un audiolibro, mirar un episodio de tu serie preferida o jugar en tu teléfono. ¡Es lo bueno de no tener que concentrarte en manejar!
Soporte para múltiples métodos de pago
Tanto el metro como el metrobús cuentan con un sistema de pagos muy accesible. Así mismo, te permiten disponer de un saldo automatizado para que cargues con efectivo ni tarjetas adicionales.
El metrobús pone a tu disposición una tarjeta exclusiva, que podrás recargar a tu conveniencia para pagar cada viaje.
Amplia cobertura de paradas y estaciones
El transporte público goza de gran alcance en la metrópoli, ayudando a las personas a moverse entre puntos lejanos. Un total de 12 líneas constituyen el sistema del metro, mientras que el Metrobús de CDMX dispone de 7 líneas.
El Zócalo, Chapultepec, el Museo Frida Kahlo o el Palacio de Bellas Artes, son algunos sitios famosos que puedes visitar viajando de esta forma.