Este remedio altamente natural, combina las propiedades del vino tinto y del ajo creando una potente bebida, que puede mejorar la salud de manera constante, además de prevenir y curar una gran cantidad de enfermedades; el ajo tiene propiedades antiséptica, fungicidas, bactericidas y depurativas. Gracias a su alto contenido de Alicina (responsable de combatir una gran cantidad de bacterias y virus). Además de limpiar el organismo de manera natural.
El ajo también combate y previene enfermedades como el colesterol alto, hipertensión, gripes y los resfriados; también ayuda con los problemas digestivos, las infecciones y la mala circulación. Muchas investigaciones realizadas además añaden que el ajo tiene propiedades anticancerígenas, ayudando a prevenir hasta un 50% el cáncer de estómago y un 66% el cáncer de colon y recto.
El vino tinto es una bebida saludable cuando se toma con mucha responsabilidad y sin abusar del mismo. El vino tinto es un antioxidante muy potente, además de tener un alto contenido en nutrientes que vienen bien al organismo. Posee de igual manera un alto contenido de Resveratrol y Flavonoides, que mejoran la salud del corazón y disminuye el colesterol progresivamente, mejoran la circulación sanguínea, promueven la regeneración celular, ayudan a reducir el exceso de peso, limpian el organismo, mejoran las funciones cognitivas y evitan el envejecimiento prematuro de la piel entre otras cosas.
El vino tinto también posee propiedades astringentes, la cuales pueden combatir bacterias bucales asociadas a las caries, también tiene acciones antinflamatorias. Además de tener propiedades anticancerosas que ayudan a prevenir el cáncer de pulmón un 50%.
Ingredientes para preparar el remedio
- 12 dientes de ajo.
- Medio litro de vino tinto de buena calidad preferiblemente.
Deberás picar los 12 ajos en cuatro partes, para posteriormente mezclarlo con el medio litro de vino tino. Luego debes envasarlo en un frasco de vidrio.
El frasco de vidrio debe ser sellado muy bien, para evitar agentes contaminantes del exterior, luego deberás dejar que repose durante dos semanas, preferiblemente guardarlo o mantenerlo en un lugar del hogar donde reciba algo de sol. Durante estas dos semanas, deberás agitar el frasco unas tres veces al día.
Para finalizar, deberás colar el líquido vertiéndolo en un frasco muy opaco para preservar el remedio y luego consumirlo diariamente. La dosis exacta para ingerir es de una cucharada de este remedio, por lo menos tres veces al día durante un mes. (Recuerda hacerlo de forma continua), es aconsejable hacer este tratamiento por lo menos dos veces cada año.
Teniendo en cuenta las diferentes cualidades que tienen el ajo y el vino tinto, podemos concluir que la mezcla de ambos crean un potente remedio, que ayuda a mantener optimo nuestro cuerpo, además de ayudarnos a curar y a prevenir enfermedades.