Eran un equipo con ambiciones, que ansiaba ganar la Copa Sudamericana para ser mejores en el fútbol. Jugadores, técnicos, periodistas y azafatas, casi todos perdieron la vida en el trágico accidente que sigue dando de que hablar en las redes sociales y las noticias. De 77 personas a bordo, solo 6 sobrevivieron al impacto. Pero no habrían logrado salir con vida de los escombros, de no ser por un chico valiente que apareció para guiar a los equipos de rescate hasta ellos.
Muchos lo llaman “niño fantasma” o “ángel de la guarda”. Gracias a él, se logró sacar del avión del Chapecoense a Alan Ruschel, uno de los futbolistas clave que sobrevivió de la caída.
Pero, ¿de dónde salió este pequeño? ¿Qué hacía un niño a altas horas de la noche en medio del cerro?
Lo cierto es que según el relato de los voluntarios que fueron a ayudar, él ya estaba ahí cuando llegaron en sus camionetas. Marulanda, uno de ellos, ofrece su misterioso testimonio:
“Cuando estábamos estacionando, llegó un niño y nos dijo que a los heridos los estaban sacando por otra parte. Uno de los policías me dijo: ‘Usted es el primero en llegar, lleve al niño en su camioneta y vaya por los heridos’”, relató.
Sin embargo nadie sabe de donde salió, ni quien es. Incluso fue imposible identificarlo después de que el rescate hubo culminado en el cerro “El Gordo”, ya que fue como si se esfumara por completo.
Alan Ruschel fue hallado consciente entre los escombros y antes de que lo internaran en cuidados intensivos, alcanzó a preguntar por sus amigos y familia, y a pedir que le guardaran su anillo de compromiso. De no ser por este niño, quizá él no habría tenido la oportunidad de pelear por su vida.
Nuestras plegarias para la tripulación del Chapecoense.