Este mismo año, se dio a conocer una hazaña de la ingeniería que hoy, es uno de los pasajes más famosos del Viejo Continente.
El Europabruecke se ganó el título del puente más largo en el planeta, incluso por encima del puente de Zhangjiajie, que se encuentra en China. Con 494 metros de extensión y una altura de 85 metros, impresiona saber que fue construido en tan solo diez semanas.
Se trata de un puente colgante que pende sobre el Cantón del Valais, entre las montañas de Randa, Suiza. Aunque fue bautizado originalmente con el nombre de Charles Kuonen, a causa de uno de los patrocinadores que financiaron su construcción, se lo conoce más como el Europabruecke.
Y recorrerlo definitivamente no es una actividad apta para quienes sufren de vértigo.
Su principal ventaja ha sido conectar las áreas de Grächen y Zermatt, entre las cuales un trayecto normal podía durar hasta un par de días.
Sin embargo, con levantamiento de esta nueva pasarela, viajeros y turistas podrán ahorrarse una cantidad considerable de tiempo.
Dicho trayecto es llamado también Europaweg, que vendría a significar “Camino Europeo” y supone una aventura casi obligatoria para quienes se animan a recorrer la intemperie de los Alpes Suizos a pie.
Si bien a simple vista podría ocasionar desconfianza entre los más escépticos, lo cierto es que se tomaron todas las medidas de seguridad necesarias para evitar accidentes. A los costados, hay cuerdas de sujeción de ocho toneladas de peso que previenen el movimiento en exceso.
El puente de hecho, pasó a sustituir a otro que se construyó en el 2010 y que suponía un potencial riesgo por el desprendimiento de piedras.
El Europabruecke fue inaugurado el pasado 29 de Julio y promete convertirse en una de las mejores atracciones de Suiza. ¿Te atreverías a caminar por aquí?