A menudo sentimos culpables del daño que como especie humana, le hacemos al planeta y lamentablemente con los animales no hay excepción. Sin embargo, hay que recordar que también hay muchas personas buenas en el mundo, que siempre están dispuestas a ayudar a las criaturas que lo necesitan. La asombrosa historia de hoy es una prueba de que no todo está perdido.
Keller Laros es un hombre al que le encanta bucear y ya tiene mucha experiencia sumergiéndose en las profundidades. Una de las actividades en las que más suele desempeñarse, es el nado con mantarrayas, en el que suele instruir a muchos aficionados.
Era un día normal para él cuando se percató de que algo extraño ocurría.
Un delfín nariz de botella nadaba en las profundidades de la costa de Kona, en Hawaii, pero no se lo veía muy bien. El animal parecía estar lastimado y queriendo ayudarlo, Keller le empezó a hacer señas para que se acercara. Ya sabrás que estos animales son muy inteligentes, así que no fue ninguna sorpresa que este lo comprendiera.
Cuando el delfín se aproximó, Keller se dio cuenta de que se había atorado con una red de pesca, pues un gancho se había incrustado en una de sus aletas.
Con ayuda de unas tijeras y mucha paciencia, fue capaz de liberar al animal en cuestión de minutos, quien se mostró muy agradecido. Pero no es eso lo más importante, sino la gran lección que él nos dejó a nosotros: la compasión no solo debe ser reservada para las personas, porque los animales también la merecen.
El vídeo que se tomó del momento ya se ha convertido en uno de los más populares de Youtube. Esta no es la primera vez que Keller se acerca a un delfín, a los que considera animales maravillosos.