El colibrí es una de los tipos de aves más curiosos y escurridizos que existen. Se caracteriza por tener patas pequeñas y plumas de colores brillantes, además de un pico delgado y muy largo, con una lengua similar a una trompa, que les sirve para extraer el néctar de las flores.
Dentro de la especie, existen 25 subespecies diferentes, de las cuales la más grande llega a medir 25 centímetros. La más diminuta por el contrario, puede medir hasta 5 centímetros y se conoce como elfo de las abejas.
Esta no solo ha sido catalogada como el pájaro más pequeño del mundo sino además, el único que cuenta con la capacidad de volar hacia atrás. Puede batir sus alas tan rápido que parece quedarse flotando en un mismo lugar, igual que hacen los insectos.
Debido a su diminuto tamaño, también es el colibrí más difícil de fotografiar o captar en vídeo.
Es por eso que el siguiente metraje, conseguido por un fotógrafo, sorprendió tanto a los internautas y no tardó en volverse viral por la red. Él tuvo la suerte de encontrarse con 30 hermosos colibríes bañándose en su fuente, para refrescarse en un día de intenso calor.
Todos jugaban y revoloteaban alrededor del agua, ajenos a la cámara que los estaba grabando. O tal vez sí que se dieron cuenta y estaban encantados con la atención.
Ahora que llega la primavera, será más común ver a estos graciosos pajaritos en muchas partes del continente americano. Si tú has notado a más de uno cerca de tu casa y te gustaría que montaran su propia fiesta en tu jardín, puedes invitarlos a entrar colocando una fuente como hizo este fotógrafo y comederos con alimentos que les gusten.
Ellos prefieren el azúcar a las semillas, así que bastará con ponerles algo de agua azucarada.