Es triste que hoy en día, cuando la mayoría de las personas se esfuerza por ganar su dinero honradamente y ahorrar hasta el último peso para comprar algo tan necesario como lo es la gasolina, siempre haya gente deshonesta dispuesta a todo con tal de quedarse con unos cuantos centavos. Recientemente se ha destapado una vergonzosa práctica que cada vez se está haciendo más popular en las gasolineras. Lo peor, es que casi siempre se salen con la suya al engañar a los clientes.
Cobrar más de la cantidad de combustible que realmente se está cargando, es algo en lo que se han vuelto expertos muchos trabajadores de estas estaciones, por lo que se debe tener especial cuidado cuando vayas a llenar tu tanque.
Cada vez son más las denuncias en contra de esta artimaña que consiste en lo siguiente: un trabajador de la estación de gasolina introduce el número de combustible a cargar, según se lo pide el cliente. Luego, aprovecha para distraerlo mientras otro colega altera el importe; pudiendo quedarse ellos con el dinero excedente.
La facturación tampoco suele ser un problema, puesto que guardan facturas de otros consumidores y las entregan de acuerdo al monto que sea de su convivencia.
¿Cómo evitar este tipo de estafa? Es muy simple: nunca apartes tu vista del marcador de gasolina. No permites que nadie te distraiga y si es necesario, bájate de tu vehículo y acércate al contador para asegurarte de que te pongan la cantidad que pediste. Cuando te entreguen tu factura, antes de marcharte revísala minuciosamente, asegurándote de que la hora y el importe coincidan con lo que pagaste y tu llegada.
Es lamentable tener que prestar tanta atención a un asunto como este, pero como siempre, la única manera de protegernos de los engaños es siendo más listos que quienes los infligen.