El aura, es un color invisible que refleja nuestro estado espiritual.
Da a conocer mucho más de nuestra forma de ser de lo que te imaginas. Tú puedes ver la tuya por medio de este sencillo procedimiento: siéntate a un metro y medio de distancia de un espejo, relájate y fíjate en tu cara, al tiempo que inhalas y exhalas por la nariz profundamente.
Probablemente tengas que intentarlo varios días, pues normal que la veas en el primer intento, así que no te desesperes.
Examina tu aura y mira lo que significa según su color.
- Turquesa. Las personas que expelen este tono son enérgicas, líderes por naturaleza y luchadoras incansables. No se dan por vencidas nunca.
- Azul índigo. El color de la gente sincera y sensata. Siempre sabe escuchar y como actuar ante los desafíos y problemas.
- Violeta. Una tonalidad propia de quienes saben que en el interior, se encuentran las cosas más importantes.
- Verde. Los individuos de aura verdosa son seres equilibrados, con una enorme capacidad para sanarse de sus dolencias físicas o sentimentales.
- Rojo. Quienes tienen el aura de este color, son apasionados pero poco profundos, con gran apego a lo material y a los placeres físicos.
- Naranja o amarillo. Un color común en las personas sociables y amistosas, que transmiten paz y alegría a donde quiera que van.
- Rosa. Identifica a quienes son capaces de sacrificarse por las personas que aman, sabiendo equilibrar su valor espiritual con las cosas materiales.
- Café. Este color identifica un “aura sucia” debido a la depresión, la baja autoestima o la falta de espiritualidad.
- Gris. Característico de los creativos y soñadores. Su imaginación es su mejor atributo, aunque a veces pueden evadirse de la realidad.
Dorado. Muy propio de las personas que despiertan admiración, pero que también tienen una fuerte voluntad.