No muchas novias entenderían si durante su boda, el día más importante de sus bodas, su flamante esposo sacara a otra chica a bailar delante de ellas.
Sin embargo, hay ciertas excepciones que se pueden hacer en una fecha tan especial. Luke Rheault y Cristina, eran una pareja que tras ocho años de estar saliendo juntos, decidieron unir sus vidas con una maravillosa ceremonia.
En la fiesta que precedió a la boda, todos estaban muy emocionados por ver el primer baile de los novios como marido y mujer. Pero antes, había otro baile que Luke quería compartir con una mujer muy importante: su madre.
Hace tiempo que ella se encontraba aquejada por un padecimiento conocido como ELA, el cual es una condición degenerativa que afecta al sistema nervioso y los músculos, impidiendo moverlos a voluntad. Su mamá, pues, estaba en silla en ruedas, pero eso no le impidió ir hasta ella y sacarla a la pista.
Al ritmo de una balada de Mariah Carey, Luke se arrodilló y comenzó a moverse junto con su madre, quien no pudo contener las lágrimas. Su hijo la besó, le ofreció un pañuelo y la abrazó, conmoviendo a todos los presentes.
La más emocionada sin duda alguna, era Cristina, que se sintió muy afortunada por la sensibilidad de su marido.
“Fue el instante más profundo que he vivido jamás”, declararía ella más tarde, “cuando mi esposo bailaba con su madre, todos los presentes soltaban lágrimas”. Y es que es imposible no hacerlo al ver este vídeo de tan solo cuatro minutos, en los que los sentimientos de madre e hijo traspasan la pantalla.
La madre de Luke falleció más adelante, pero él sigue sintiéndose afortunado por haber tenido la oportunidad de compartir ese último baile con ella. Su recuerdo siempre permanecerá en su corazón.
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