No hay nada más agradable que sentir que tienes el cutis limpio y terso como el de un bebé.
Por desgracia no siempre es fácil, pues cuando creces tienes que enfrentarte con las constantes y odiosas imperfecciones. Espinillas y barritos que aparecen en los momentos más inesperados y hacen que tu piel luzca fatal. Lo peor son los puntos negros.
Para deshacerte de ellos, no tienes que invertir en tratamientos costosos ni productos milagrosos. Basta con que uses dos ingredientes súper económicos que efectuarán una limpieza profunda en tu cara. Estos son:
- Leche
- Gelatina sin sabor
No subestimes esta básica combinación. Ambos pueden hacer maravillas por ti si les das la oportunidad.
- En un recipiente, pon una cucharada de gelatina en polvo.
- Agrega dos cucharadas de leche y revuelve ambas cosas, hasta formar una pasta homogénea.
- Mete la mezcla al microondas por 15 segundos, para ablandarla y evitar que se endurezca.
- Con el rostro limpio y recién enjuagado, te la vas a aplicar como si fuera una mascarilla, aún calientita. Espera por unos 15 minutos a que se seque.
- Comienza a desprender la mascarilla de leche y gelatina, ¡y mira como los puntos negros salen de tu cara!
Una vez que los hayas sacado todos, sentirás tu piel limpia y muy suave. Ponte una crema hidratante, pues lo caliente de este remedio puede resecar tu cutis un poco. Haz uso de este método una o dos veces a la semana, (dependiendo de tu tipo de dermis y los problemas que la aquejan), y no tendrás que preocuparte nunca más por las impurezas.
Recuerda que es muy importante que uses ingredientes de buena calidad, a fin de garantizar el éxito de tu limpieza facial. La leche orgánica especialmente, es la mejor opción para llevarla a cabo.