A veces algunos amores están destinados a cumplirse, a pesar del paso del tiempo. Kathie y Ed eran dos adolescentes que hace algunas décadas, se enamoraron muy profundamente el uno del otro. En su época, las reglas para las relaciones eran muy estrictas, de modo que sus padres no les permitían tener citas. Tenían solo 14 y 15 años respectivamente.
La única manera en la que podían disfrutar de su compañía, era durante las visitas que Ed hacía en casa de Kathie y en las que tenía que estar presente su hermana menor.
Durante tres años estuvieron citándose de aquella manera y Kathie nunca le dejó que la besara, por decoro. Lamentablemente, el tiempo y el comportamiento tan estricto de sus padres terminó por separarlos, y ambos se casaron con personas distintas.
Tras vivir al lado de su esposa por 64 años, Ed formó su familia, tuvo nietos, envejeció y vio morir a esa mujer con la que había hecho su vida. Deprimido, decidió rescatar una vieja agenda de su juventud y ponerse a mirar los contactos. Fue así como dio con el número de Kathie.
Habían transcurrido 74 años desde su separación, pero tenía curiosidad por saber que había sido de ella. La llamó y se asombró de descubrir que aún vivía en su vieja casa.
Resultó que Kathie también había vivido 54 años al lado de su marido y desde que había enviudado, estaba sola. Le dio tanto gusto saber que quisieron reunirse y recordar los viejos tiempos. Pero cuando se vieron, ese antiguo amor que habían sentido el uno por el otro volvió a resurgir.
Ahora no tenían que esconderse de nadie y a pesar del tiempo, podían darse una segunda oportunidad. Hoy, son una pareja feliz; Ed le pidió casamiento a Kathie y no se los puede ver más felices.
Comparte esta hermosa historia si crees que el amor verdadero si existe, el punto es encontrar a la persona con quien sentirlo ¿no crees?